Hai veces que no nos damos cuenta de lo que tenemos adelante hasta que lo estamos por perder, y esas veces son las mas duras, porque (por lo general) es demasiado tarde para tratar de arreglar las cosas y terminamos perdiendo algo que no habíamos valorado lo suficiente, por no habernos dado cuenta antes. Es en esos momentos que se nos viene todo abajo, se derrumba nuestro mundo, sucumben los esquemas ante la falta de algo donde fijarse, se sacuden las estanterias porque las paredes no son lo suficientemente firmes para matenerlas. Aquellos que tenemos mentes vulnerables, acabamos dejando que todo se lo lleve la corriente. Y otra vez se nos hace tarde para empezar a correr, alcanzarlo y recuperarlo, porque la corriente va rapido y nosotros no tenemos ni lancha, ni bote, ni patas de rana. Asi que es practicamente inevitable que eso se pierda. A unos pocos con suerte logran que ese algo se detenga en un punto determinado, donde lo pueden alcanzar y lograr que todo vuelva o aparente volver a ser lo de antes, aunque dificilmente lo logren. Me pasó, no quiero que me vuelva a pasar, no quiero volver a no darme cuenta de lo que pierdo o estoy perdiendo, no quiero que la corriente valla demasiado rápido, no volver a tener lancha y que mis piernas no den avasto. No quiero volver a perder. Gracias a Dios, creo que con ella no me pasó y no creo que me esté pasando. Te amo amiga, gracias por hacerme tan feliz, por estar conmigo siempre. Gracias por todo.
(Feliz cumpleaños)
